miércoles, 16 de septiembre de 2009

León


Hace un par de años leí Ana Karenina, y aunque me resultó un poco pesado, casí como un culebrón, leí algo que me marcó, y que resumí en una página, uniendo distintos párrafos de entre unas 30 páginas del libro hacia el final de este.
Estoy un poco perezoso así que escaneo la hoja que imprimí por aquel entonces y así se podrá leer igual.
Diréis que vaya forma de comenzar un blog, con pereza y con una fotocopia, pero bueno hoy soy así.

1 comentarios:

sherpa dijo...

El fin de mi vida es amaros...más allá de todo sufrimiento, más allá de toda dificultad...el fin de mi vida es que esa célula que soy yo sea solo una contigo y con nustros hijos.
Muy buen texto...si hoy me preguntaran cómo he logrado seguir viva después de tanto dolor contestaría: amando y compartiendo estas reflexiones contigo.
Zahir...sigo teniendo muchas dudas...pero hay algo de lo que no dudo y es de cuánto os amo a los tres.